miércoles, abril 26, 2006

el otro sendero...

Aquellos que creemos que hay una vida después de esta... y que además es mejor, siempre tenemos la esperanza de que cuando alguien querido nos deja el único dolor es el de no volver a verle... que no es poco...
pero que al otro lado de ese abismo desconocido sigue acompañándonos día a día y que, desde su privilegiada posición, cuida nuestras vidas y nos abraza incluso cuando nadie -de nuestro mundo- puede.
Es la fortuna que nos sigue, incluso aquellos de quienes ya no podemos disfrutar plenamente en este mundo real, nos acompañan en la virtualidad de nuestros pensamientos, de nuestros recuerdos y de nuestros deseos, de nuestras oraciones...
Ya que lo único que tenemos garantizado en esta vida es precísamente la seguridad de que la perderemos... deseo de corazón disfrutar de todos vosotros mientras pueda (espero que Dios me conceda el privilegio de que sea durante toda mi vida) y que, después de una larga y plenamente feliz vida, pueda abrazaros al otro lado cuando vaya y que los que vayáis antes que yo me abrazeis también...